Sobre mi
No necesitas ser flexible ni tener un cuerpo tonificado para practicar Yoga, sólo debes encontrar la parte del Yoga que conecte contigo y más te pueda ayudar en el momento vital en el que te encuentres.
Me alegra mucho que estés aquí y no quiero contarte de forma fría qué hago y cuál ha sido mi trayectoria.
Prefiero hablarte de todas las veces que “fracasé” y cómo cada uno de mis pasos me han llevado a donde estoy hoy.
2013- 2015
Me licencio en Comunicación y sueño con trabajar en grandes medios, pero empiezo en una emisora de radio a hacer mis pinitos por 0€ y tengo que vivir con lo que gano como azafata de eventos.
*Por aquel entonces no lo sabía pero lo que aprendí como locutora me ayuda muchísimo en las clases y talleres que imparto ahora
Termino el curso de
Instructora de Aerobic y Step
Trabajo en la agencia que anteriormente me contrataba para los eventos y me convierto en Ejecutiva de cuentas.
También dirijo y formo a un equipo de promotoras.
Abandono la idea de ejercer de lo que he estudiado
Sigo trabajando como Ejecutiva de Cuentas con grandísimos clientes como Google.
En estos años empiezo a practicar Yoga en el gimnasio pero no me encanta.
Pregunto a varios yoguis y establezco una pequeña rutina diaria de 30 minutos que hago todas las mañanas.
2018
Algo dentro de mí me pide ver otras realidades. Me voy a Guatemala a colaborar en un proyecto con niñ@s y ejerzo, principalmente, como profe de Educación Física.
También me da tiempo a publicar un libro
2019
Me enamoro profundamente.
En la empresa en la que trabajo implantan dos días a la semana de Yoga y mi vida cambia.
Trabajar como Instructora rondaba mi cabeza desde que me certifiqué en 2013 pero ahora la motivación era muchííísimo mayor: El Yoga es una disciplina que tiene que llegar a todas las personas.
Y cuando empiezo a pensar en cómo dar ese gran giro profesional llega una pandemia y…
me despiden
2020
Es el momento de certificarme como instructora de Yoga y meditación y apostar por elllo.
Obtengo mi título de 200h en la
Yoga Evolution School de forma semipresencial.
Y como ya tengo experiencia dando clases, me lanzo enseguida y le ofrezco practicar conmigo a tooodas las personas de mi alrededor.
Durante el confinamiento doy clases Online diarias a mis familiares y amigos.
y este se convierte en un momento muy mágico que recordaré siempre
Llega otro momento en mi vida en el que necesito respuestas y me voy a Uganda a colaborar con otro proyecto con niñ@s.
Muchas mañanas practicamos Yoga juntos.
Estoy allí un mes y aprendo muchísimo sobre cómo hacer que a los peques les resulte lo más entretenido y útil posible.
2021
Sigo avanzando en mi proyecto profesional y ya doy clases en centros de quiromasaje, gimnasios y en varios domicilios de alumnas.
Y me quedo embarazada.
Yo siempre poniéndome las cosas fáciles 😀
2022
Nace mi bebé y observo todos los beneficios que ha tenido el Yoga en mi embarazo, parto y posparto y, aunque ya daba muchas clases de este tipo antes, ahora aplico todo lo que he experimentado de primera mano.
2023
Creo un taller de Yoga Infantil en base a todo lo aprendido en los proyectos internacionales y como madre.
Tiene muy buena acogida entre los centros educativos y me contratan para enseñar a las educadoras a integrar el Yoga en el día a día de los más pequeños. (Actualmente colaboro con seis escuelas y colegios de Madrid).
También llamo a las empresas del sector en el que trabajaba antes y les hago una propuesta: Enseñar a los/as empleados/as a aplicar técnicas efectivas de Yoga y Mindfulness en su día a día.
Aquí estoy impartiendo uno de ellos 🙂
Faltan muchos episodios de inflexión en esta historia, pero era imposible juntarlos todos en una sola página.
No cuento que en 2015 sufrí una crisis de ansiedad que me dejó paralizada más de una semana y ahora me permite entender y ayudar mejor a quienes vienen a practicar Yoga por este motivo.
También me alucina que cuando viajaba a los voluntariados (usando todos mis días de vacaciones) sentía que estaba invirtiendo en mi desarrollo personal, pero que no tenía absolutamente nada que ver con mi realización profesional.
Sin embrago, el tiempo le da la vuelta a todo.
Confía, date tiempo y, lo más importante, no vayas aplazando lo que te apetece mucho hacer. Nunca sabes lo que te deparará el futuro pero, por lo menos, que te pille disfrutado.
Te mando un fuerte abrazo,
Eva
